El duelo es el proceso que atravesamos al enfrentarnos a una pérdida. Las pérdidas son diferentes para cada ser humano, por ejemplo, podemos atravesar un proceso de duelo por haber perdido dinero, una mascota, un objeto material apreciado, un amigo, un familiar, una pareja, etc. El proceso de duelo implica sanación y transformación, sin embargo, su duración y su resultado también varían de acuerdo con las estrategias de afrontamiento que cada ser humano tiene, de acuerdo a lo significativa que sea la pérdida, al proceso de sanación que desarrolle, a la forma en la que se dio la pérdida y a la gestión de emociones que se produzcan tras la pérdida.
Es normal que el duelo produzca alguna forma de malestar fisiológico (dolor de cabeza, cansancio, náuseas, etc.) sin embargo cuando este se mantiene a lo largo de varios días es necesario ser evaluado por un médico. En la gestión emocional, es importante entender que hay emociones que sí o sí van a aparecer y son totalmente normales en la medida en que se solucionen y permitan que la persona atraviese dicha etapa.
Hablamos de atravesar un proceso de duelo cuando:
- Una relación muy importante para ti finalizó.
- Perdiste a un ser amado y no sabes cómo cerrar el duelo.
- Tu vida cambió de un día para otro y ahora necesitas hacer un cierre.
- Sufriste abandono de una persona o ser significativo en tu vida.
- Tenías un apego y este se vio interrumpido.
Cuando atravesamos y sanamos el proceso de duelo, logramos convertirnos en otro ser humano, se le da un significado a la pérdida y reconstruimos nuestra vida. Desde la consultoría clínica en ACT y la terapia cognitivo conductual, trabajamos en equipo contigo para apoyar tu proceso de duelo, para orientarte y acompañarte en este momento crucial en tu vida.
¿Estás atravesando un proceso de duelo y quieres apoyo al respecto?
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